miércoles, 22 de junio de 2011

X razones para sobrevivir

- X los que me quieren
- X la amistad
- X formar parte de esto
- X que sí
- X la risa
- X los errores que pueda corregir
- X que quiero enamorarme siempre que pueda
- X la luz de la mañana
- Xª poder compartir y dar
- Xª aprender
- X luchar contra la injusticia
- X la música
- X el abrazo que quiero dar siempre
- Xª poder enseñar lo que he aprendido
- X contemplar la luna llena
- X disfrutar de la lágrima de un niño
- X secar la lágrima de una mujer
- X conocer gente interesante
- Xª oler la primavera
- Xª echar una mano a un anciano
- X disfrutar de la naturaleza
- Xª poder equivocarme
- Xª provocar y ser provocado
- Xª ser querido
- X miedo a la muerte
- X muchas razones
- X el buen humor
- X la sorpresa
- X curiosidad
- X sentarme y ver cómo viven los demás
- X confusión
- X soñar con un mundo mejor
- Xª vivir y dejar vivir
- Xª seguir amando en secreto
- Xª superar obstáculos
- Xª sobrevivir.

miércoles, 15 de junio de 2011

Chesterton

Es claro que si no se quiere, no se intenta alcanzarlo; pero que no se diga que porque no se quiere se sigue que no se podría alcanzar si se quisiera. Una cosa no se hace intrínsecamente imposible simplemente porque una multitud no trata de obtenerla, ni deja de ser política práctica, porque no haya político suficientemente práctico para seguirla.

viernes, 10 de junio de 2011

El refugio de la memoria

Si queremos mejores gobernantes tendremos que aprender a pedir más de ellos y menos para nosotros. Un poco de austeridad estaría bien.
Tony Judt
Imprescindible.

jueves, 9 de junio de 2011

Derechos Torcidos de Esteban Beltrán

Mis dos prioridades absolutas serán los últimos de la fila y el futuro. No siempre tomaré medidas confortables para todos y muchas veces no estaré de acuerdo con lo que la mayoría de la gente diga. Gobernaré con los principios aunque cueste dinero.
No tomaré medidas pensando en las próximas elecciones, sino más a largo plazo, con el fin último de hacer de nuestro país y nuestro mundo un lugar más justo y estable para vivir. No será fácil, pero no mantendré el pragmatismo a corto plazo que hipoteca la vida de las próximas generaciones. No quiero engañar a nadie: la mayoría de la gente tendrá que renunciar a una parte mínima de esta vida confortable para que otra parte del mundo, lejos, la vida tenga tal nombre.
No habrá subsidios a la agricultura, no venderé armas a nadie y cerraré todas aquellas industrias que contaminan. Además, los impedidos, los enfermos terminales, los drogadictos, los sin techo, las mujeres inmigrantes,los presos, los niños de la calle y los jubilados, tendrán prioridad en los próximos presupuestos generales del Estado para reducir su sufrimiento y que tengan las mismas oportunidades que ustedes.
Visitaré, inmediatamente después de tomar posesión, los países más pobres del mundo, abriré nuestras fronteras a sus productos y la ayuda al desarrollo se equiparará, en dinero real, a nuestro presupuesto de defensa...

¿Cuándo fue la última vez que, mirando más allá de nosotros, pensamos en algún gobierno, vimos lo que hacía y nos sentimos orgullosos de compartir el mismo país, el mismo planeta? ¿estaría dispuesto a aceptar tener menos para que más personas tengan algo? ¿votaría usted a un candidato a un presidente del gobierno que impulsara ésta política y se lo contara sin tapujos?
Política ficción ¿verdad?

lunes, 6 de junio de 2011

CARTA A MIS ALUMNOS

Me considero una persona comprometida; con mi trabajo, con mi pareja, con mi familia y con el mundo, de ahí que me sienta un ser afortunado.
Siempre he pensado que mi esencia podría haberse formado en otro sitio y mi vida habría sido completamente diferente, incluso en otro tiempo donde ya sería abuela o habría muerto de alguna de las enfermedades que, afortunadamente, hoy tienen cura.
Pero quizás por ésto, o tal vez por mi adicción a la lectura o por mis ganas de aprender cada día, o por mi formación en historia... mi relación con el entorno se torna cada vez más estrecha y siento igual de cerca al latino, al musulmán, al chino, al occidental, al español, a cualquier persona.
Para explicar como me siento en mi entorno sería justo ser sincera y aunque yo consigo llevarme bien conmigo misma y soportarme, no sucede así con mi entorno. Hay muchas cosas cotidianas que no soporto: la falta de educación, la suciedad cuando existen papeleras, las mierdas de los perros por la calle, que la gente tire sus basuras a cualquier parte sin importarle quién pase luego por allí, que los jóvenes no admiren a sus mayores, que no busquemos los mejores ejemplos, que nos conformemos con la mediocridad y que aún así nos sintamos importantes.
Siempre he querido ser profesora, desde que recuerdo, quizás por eso tengo tantas ganas de aprender, pero cuanto más aprendo, más me sorprendo y aquí es donde toca hablar del mundo que habito.
He comenzado a viajar muy joven, y aunque no he recorrido aún muchos países, ya puedo establecer una diferencia entre los países ricos y los países pobres. Los países pobres son mucho más hospitalarios, más amables, más educados y más solidarios que los países ricos y no dejo de preguntarme ¿por qué? aún no he encontrado una respuesta que me satisfaga, pero sigo jugando con distintas variables.
El mundo en el que yo crecí era mucho más libre y más justo que el mundo hoy habitamos, y mi sensación, a pesar de considerarme un ser optimista, es que vamos a peor.
Hoy en día, donde las diferencias entre ricos y pobres ya debían estar más que superadas, se ha formado un abismo. Hoy, que la paz debería ser el "Leimotive" de nuestro día a día, hay más conflictos armados que en cualquier otro periodo del pasado. Hoy que podríamos compartir el tiempo con el resto de nuestros semejantes, nos aislamos detrás de cualquier pantalla. Hoy, que no deberían existir las fronteras, levantamos alambradas y contratamos alarmas para sentirnos seguros en nuestro castillo. Hoy, que se nos llena la boca con la palabra DERECHOS, estamos dejando que nos los arrebaten a puñados. Hoy, que tenemos acceso a todas las palabras, de todos los idiomas, cada día usamos más palabras oscuras, simples y dañinas.
Por eso hoy 4 de mayo de 2011, queridos alumnos, he deseado compartir con vosotros mi relación con el entorno y con el mundo actual, porque creo que los jóvenes tienen en sus manos el futuro, un futuro que no está escrito y que nadie escribirá por vosotros, pero del que sois los únicos responsables.
Lo más importante para mí es ser un poquito mejor persona cada instante, cada día, cada momento y no dejar de intentarlo.